La VIDA es OTRA cosa
no sé exactamente qué
pero un día un poeta se pone a disfrutar la vida
se da el derecho divino de quedarse viendo
una lluvia de naranjas
untándose un bálsamo de mandarinas
mientras, allá arden Sodoma y Gomorra
y enciende un cigarro con la hoguera humana gigante.
"A REIR TODO EL MUNDO, YO INVITO!"
Son sus últimas palabras, las primeras.
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